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El Carro de Compras esta Vacío.
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Dra. A mi hijo no le da hambre!
La falta de apetito en pediatría
1.CAUSA INTERNA O PROPIAMENTE DEL NIÑO O NIÑA.
En etapa de enfermedad, es normal que la propia enfermedad provoque falta de apetito, incluso algunos tratamientos que los médicos indicamos y que son necesarios, puede bajar el apetito.
En algunos trastornos conductuales como por ejemplo déficit de atención, hiperactividad o autismo, en donde el infante no logra conectar en su alimentación, teniendo hasta dificultad para estar sentado un cierto tiempo y dedicarse a comer.
Cambios en el paladar o en los hábitos, aquellos pequeños que consumen muchos azucares, alimentos salados, bebidas artificiales, chocolates, golosinas, comido chatarra difícilmente querrán comer un brócoli o un relleno de papa. Es por eso que, si estas en etapa de introducción de alimentos que tu meta sea que todos los alimentos sean lo más natural posible, evitaras estos problemas de alimentación y evitaras que en su vida de adulto no padezca de enfermedades como diabetes o hipertensión incluso algunos canceres.
2.CAUSA EXTERNA DEL NIÑO O NIÑA
El ambiente donde comen nuestros pequeños tiene que ser un momento agradable y no estresante ni para mamá ni para su hijo, evitar comentarios negativos como el “otra vez me dejaste toda la comida” “hay niños que no tienen ni para comer” “con vos si me cuesta”, “si supieras lo que me cuesta”, error fatal es premiar o castigar con la comida. “si te terminas la cena, te daré un chocolate” nooooo, no caigas en esto por favor.
El stress o depresión materna, paterna o de su cuidador, aunque no lo creas esto está muy relacionado a la falta de apetito de un niño.
Distractores como las pantallas, los televisores al momento de las comidas no permiten conectar con los alimentos, y las señales de saciedad a nivel cerebral no las detectara, resultando con trastornos de alimentación.
Puntos claves:
Saber que la alimentación de un niño se tomara tiempo hasta una hora y es normal, tiene que haber una alimentación consciente, donde el niño tiene que conocer los alimentos, notar sus colores, consistencias, masticar, comer a su ritmo, y detenerse cuando este satisfecho.
Las cantidades que un niño comerá, jamás serán como las del adulto.
Es importante que vea comer saludable a sus papas y que este momento sea agradable, platicar de los recuerdos de salidas, cumpleaños incluso de los sueños que tienen como familias, viajes etc.
Hacerle saber a tu hijo para que sirven esos alimentos que tiene en su plato, ejemplo “estas zanahorias se cultivan en la tierra (por eso las lavamos bien) y ahí crecen, pero luego las sacamos y al comerlas tienen un sabor tan rico que ayuda a nuestros ojos puedan ver muy bien de lejos, cuando estemos arriba de un avión vamos a poder ver bien las cosas de abajo”.
La edad del infante es importante porque algo que tienes que reconocer es que por ejemplo un bebe de un año, no le interesa si la canasta básica ha subido de precio y que mamá quiere que se acabe la comida, a este bebé le interesa jugar y tirar todo, para todos los niños su mayor objetivo es jugar y no terminarse en plato de comida al ritmo de un video de tiktok.
Así que paciencia, ánimos y sobre todo asesórate con tu pediatra para vivir esta etapa de la mejor manera sin causarte stress ni traumas a tu pequeño.